El carbón activo tiene un enorme efecto purificador. Como el Binchotan tiene un porcentaje de carbono del 96-98%, se utiliza desde el siglo XVII en Japón para purificar el agua de forma natural. El binchotán puede utilizarse en varios tipos de botellas y garrafas de agua. Primero active el Binchotan hirviéndolo en agua durante 10 minutos y luego déjelo enfriar. A continuación, purifica el agua colocando el Binchotan en una jarra o botella, dejándolo durante al menos una hora y girando la botella varias veces. Después de 6 meses el efecto se reduce, puedes reciclar el Binchotan como combustible en la barbacoa o reactivarlo hirviéndolo de nuevo. El binchotán también puede utilizarse para hacer crecer las plantas al romperlo en pequeños trozos, lo que libera importantes nutrientes. Por último, Binchotan es un eficaz absorbente de la humedad, que absorbe fácilmente los malos olores de la ropa y el calzado.